Con su resolución, el titular de la Fiscalía Federal 1 pidió al juez Marcelo Martínez de Giorgi la pesquisa e imputó a Macri, Gustavo Arribas y a otros agentes de la AFI, algunos de ellos todavía en funciones.
Los seguimientos que son denunciados habrían comenzado en junio de 2016 y las víctimas del espionaje habrían sido tanto dirigentes políticos de la entonces oposición como así también integrantes de Cambiemos. También sindicalistas, intelectuales, periodistas y comunicadores. Entre los nombres involucrados se encuentran Martín Sabbatella, Laura Alonso, Luis Majul, Ricardo Forster, Héctor Daer, Omar Perotti, Rodolfo Tahilade y Mario Negri
Entre el material que maneja Di Lello se ubica variada documentación y un disco rígido que fue encontrado durante (según los denunciantes) una revisión de rutina. También se puntualizó que gran parte de lo que había en el disco fue borrado, pero tras un rápido trabajo de recuperación el material se encuentra ya en uso judicial.
Caamaño quiere la indagatoria de Macri al entender que la dependencia de Inteligencia es responsabilidad directa del Jefe de Estado.
Al mismo tiempo, y según remarcó Página 12, el agente que estaba a cargo de la computadora donde se halló la nómina de más de ochenta correos electrónicos personales de políticos, dirigentes y políticos, está identificado. Por eso, la AFI pidió también que él y otros cinco empleados sean indagados por la Justicia.