Triunfa la ultraderecha en Francia: Bardella podría ser el nuevo primer ministro

Las elecciones europeas se desarrollan en tensión entre las fuerzas políticas polarizadas. En Francia, si bien el partido de ultraderecha Agrupamiento Nacional (RN por sus siglas en francés) ha conseguido ganar la primera vuelta con un 33,5% de los votos, aún no se ha definido quién ganará las elecciones, puesto que se sabrá recién el próximo 7 de julio si Jordan Bardella (el candidato de RN) es electo como primer ministro, en la segunda vuelta.

De esta forma, el partido liderado por Marine Le Pen se impuso este domingo en primer lugar, seguido por el bloque de izquierda Nuevo Frente Popular y en tercer lugar la formación de Macron. RN consiguió cerca del 30% de los votos, y junto a sus aliados de la Unión de la Extrema Derecha (UXD), alcanzó el 33,15%. La coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP) quedó en segundo lugar con el 27,99%, por delante del partido de centro del presidente Emmanuel Macron que se situó en tercer lugar, con el 20,04% de los sufragios. Ambos bloques han hecho llamamientos para unir fuerzas y retirar a sus candidatos en los casos en que hayan quedado terceros y en primer lugar esté RN.

El domingo próximo podría darse el caso de que Agrupamiento Nacional perdiese la elección en segunda vuelta. Esto se debe a que el sistema electoral francés no es proporcional, es decir, que las candidaturas se juegan en cada vuelta, donde sólo un diputado resulta electo. Si sucede que un candidato a diputado obtiene más del 50% de los votos de su circunscripción en primera vuelta, resulta electo; de lo contrario se deberá ir a segunda vuelta, que se disputará entre los dos candidatos más votados.

Por otro lado, estas elecciones han resonado de forma significativa debido a su extensa participación: se alcanzó el 66%, convirtiéndose así en la más elevada en una primera vuelta en elecciones legislativas francesas desde 1981.

Los resultados obtenidos por el partido de Macron no resultan sorpresivos, dado que la inflación y la pérdida de poder adquisitivo de la población dejó un gran descontento con sus políticas. Sin embargo, luego de que trascendieran los porcentajes, las calles de París se inundaron con un fuerte rechazo ante la escalada de las fuerzas ultraderechistas.