La decisión oficial se expresa a través de un DNU que dispone la intervención del grupo Vicentín, además de designar como interventor al experto Gabriel Delgado, que formó parte del anuncio junto al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas y la senadora Anabel Fernández Sagasti, una de las autoras del texto de la expropiación.
«Estamos mandando al Congreso una ley de expropiación», señaló el Presidente, quien agregó que «todos los activos pasarán a formar parte de un fondo fiduciario», además de que se le encomendará la gestión a YPF Agro.
«Buscamos que una empresa líder de capitales mixtos pueda hacerse cargo de la gestión de esta empresa, queremos rescatar en favor de la economía, y una parte de la economía que tiene particular relevancia, que es el mercado de granos y cereales», continuó Alberto.
«Una empresa que se dedica a la producción de alimentos en un momento pospandemia que tiene una importancia central», apuntó y destacó que con esta acción se avanza en la meta de la «soberanía alimentaria«.
Asimismo, destacó que Vicentin «está en concurso preventivo de acreedores» y que los productores del agro con esta noticia «estarán muy contentos».
«Es una operación de rescate de una empresa de magnitud en el mercado agrícola. Favorece a la Argentina para lograr una soberanía alimentaria que la Argentina necesita», resumió Fernández.